Una nueva edición en la que hay que leer y buscar al mismo tiempo, ¿quién se anima a hacerlo mientras hablamos de una criatura temida por muchos, y odiada por otros?
Cuando un dementor afecta a una persona, lo hace de forma exclusivamente negativa, y no hay nada bueno en lo que causa, porque se alimentan de lo más importante para un ser humano: su felicidad, y sus recuerdos más alegres. ¿Hay posibilidades de defenderse de estos seres tan horribles? ¿O estamos condenados a sucumbir antes efectos tan desoladores si llegamos a encontrarnos con ellos?
Cuando hablamos del dementor, nos imaginamos a un ser cubierto con una capa de color negro, pero lo que hay debajo es un misterio totalmente, aunque sí sabemos que donde deberían tener un rostro, en realidad hay un orificio abierto que funciona como boca, y un poco más arriba está una membrana, o algo así, que es lo único de su físico que se conoce. Os podéis imaginar cómo es encontrarse a algún dementor, pero lo hagáis o no, tened siempre en mente una cosa: es importantísimo que conozcáis las formas de combatir a este tipo de criaturas.
La verdadera forma de hacerlo es con un hechizo que es muy simple para unos, complicado para otros, y que dependiendo de su intensidad, conseguirá que el dementor se aleje de ti y no vuelva a acercarse a ti en varios kilómetros: el encantamiento patronus. Algo debemos saber de este hechizo, y es que no es fácil hacerlo, porque necesitas tener no solo el recuerdo más feliz que tu mente pueda recordar para proyectarlo sobre el dementor, sino una habilidad mágica que esté preparada para proyectar esos pensamientos de su lugar de origen hasta el mundo exterior.
Tenemos muchas teorías perdidas por ahí que podrían explicar qué es lo que hace de un dementor un ser tan horrendo, pero ninguna es confirmada porque hay una versión, que no es definitiva, del tercer libro ya que aparecía una frase que indicaba que el daño que le hacían a un ser humano era lo que causaba que este se convirtiera en algo como ellos, desalmado y perverso. Es algo que no está confirmado, pues la autora no la ha incluido en la versión final, pero es algo que tendría sentido y muchas personas creen que podría ser cierto, ¿qué pensáis vosotros?
Cada vez que un dementor se desplazaba a otro lugar que no fuera la prisión de azkaban, era porque el ministerio de magia se lo había permitido ya que estaban, en teoría, bajo el control de esta. O eso creían los trabajores de este, especialmente el ministro del momento, pero no era, para nada, así, y por desgracia lo averiguaron durante el regreso de voldemort, al menos cuando se enteraron. No pueden ser vistos por los muggles, algo que, en aquella época, resultó muy desconcertante para estos ya que sí que los pueden sentir y al poder campar libremente, la sociedad no mágica los notaba de una forma u otra, no siempre de la mejor forma.
Lo que cualquiera se podría imaginar es que encontrarse con uno podría ser terrorífico y causar un trauma irreparable, ¿pero y si os dijera que ese sería el menor de vuestros problemas? En caso de que uno os pudiera robar un recuerdo feliz, y que se alimentara de vuestra felicidad, rezad para que se quede en eso y no en nada más, pues el beso del dementor (la única forma que hay de ver qué es lo que hay debajo de la capucha) puede conseguir que vuestro cuerpo se convierta en un recipiente para vuestra vida, pero no para el alma que os pertenecía.
Con un cuerpo sin alma, ¿qué es lo que se siente? ¿Hay pensamientos dentro del mago o la bruja víctima del dementor? ¿Es una pérdida irreparable, o hay una forma de recuperar el alma y todavía no ha sido descubierta?