Si es un mago o bruja que utiliza su varita, y si nosotros le preguntáramos dónde la compró, es muy posible que su respuesta fuera la misma que la de tantos otros: Ollivander, prestigiosa tienda donde las haya y que actualmente se ha visto envuelta en la polémica y expectación por querer utilizar lo que muchos han llamado como su versión de la inteligencia artificial.
Si usted está en su casa tranquilamente leyendo el Daily Beagle, es posible que se esté preguntando: ¿qué es una inteligencia artificial? y este su humilde periodista quiere ayudarles a saciar esa curiosidad. Según me han revelado diferentes fuentes, una inteligencia artificial es una creación muggle que consigue equiparar la mente humana, y tras años de ardúo trabajo, el actual propietario de Ollivander afirma haber creado un autómata que es capaz de emular la propia magia de las varitas.
Al preguntarle sobre de dónde vino tan novedosa idea, nos comenta que la idea se la dio su esposa un día mientras tomaban el té. Ella, nacida de muggles, le explicó lo mucho que se divertían sus sobrinos con diferentes IAs, el sobrenombre cariñoso que le han puesto los muggles a las Inteligencias Artificiales, y eso llamó su atención. Si los muggles podían crear algo así, ¿por qué no podría un brujo crear algo similar? Su esposa, presente cuando les hicimos la entrevista, afirma que fue un proceso largo y arduo que le hizo sentir en más de una ocasión que o bien acababa con el autómata o con su matrimonio, aunque este reportero puede asegurar que se les veía felices y contentos el uno con el otro.
Con este invento, Ollivander planea ponerse aún más si cabe a la vanguardia de los elaboradores de varitas. Se acabaron los intentos y el ensayo y error buscando instrumental mágico, se rellena un cuestionario, como si de un examen se tratase, y el autómata escribirá la varita que cree que más encaja con la persona. Luego solo tiene que entregarlo a cualquier dependiente de la tienda que comprobará la eficacia poniendo a prueba una varita del mismo tipo que haya indicado. Las pruebas realizadas antes de su lanzamiento afirman que la precisión ha sido cercana al 100%, no siendo por una persona que respondió las preguntas al azar.
Ollivander invita a que todo el mundo se pase por su tienda y poner a prueba a su automata. Acertado o no, ya son varias las personas que se han movilizado a probar fortuna. ¿Habrá creado el dueño de Ollivander una proeza de la magia?